IV Domingo de Adviento
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Nacimiento del Señor
25 diciembre, 2018

Feria de Adviento

II Samuel 7, 1-5; 8-12; 14; 16

1 Cuando el rey se estableció en su casa y Yahveh le concedió paz de todos sus enemigos de alrededor, 2 dijo el rey al profeta Natán: «Mira; yo habito en una casa de cedro mientras que el arca de Dios habita bajo pieles.» 3 Respondió Natán al rey: «Anda, haz todo lo que te dicta el corazón, porque Yahveh está contigo.» 4 Pero aquella misma noche vino la palabra de Dios a Natán diciendo: 5 «Ve y di a mi siervo David: Esto dice Yahveh. ¿Me vas a edificar tú una casa para que yo habite?

8 Ahora pues di esto a mi siervo David: Así habla Yahveh Sebaot: Yo te he tomado del pastizal, de detrás del rebaño, para que seas caudillo de mi pueblo Israel. 9 He estado contigo dondequiera has ido, he eliminado de delante de ti a todos tus enemigos y voy a hacerte un nombre grande como el nombre de los grandes de la tierra: 10 fijaré un lugar a mi pueblo Israel y lo plantaré allí para que more en él; no será ya perturbado y los malhechores no seguirán oprimiéndole como antes, 11 en el tiempo en que instituí jueces en mi pueblo Israel; le daré paz con todos sus enemigos. Yahveh te anuncia que Yahveh te edificará una casa. 12 Y cuando tus días se hayan cumplido y te acuestes con tus padres, afirmaré después de ti la descendencia que saldrá de tus entrañas, y consolidaré el trono de su realeza.

14 Yo seré para él padre y él será para mí hijo. Si hace mal, le castigaré con vara de hombres y con golpes de hombres.

16 Tu casa y tu reino permanecerán para siempre ante mí; tu trono estará firme, eternamente.»

 

Salmo 89, 2-5; 27; 29

2 El amor de Yahveh por siempre cantaré, de edad en edad anunciará mí boca tu lealtad. 3 Pues tú dijiste: «Cimentado está el amor por siempre, asentada en los cielos mi lealtad. 4 «Una alianza pacté con mi elegido, un juramento hice a mi siervo David: 5 Para siempre jamás he fundado tu estirpe, de edad en edad he erigido tu trono.»

27 «El me invocará: ¡Tú, mi Padre, mi Dios y roca de mi salvación!

29 «Le guardaré mi amor por siempre, y mi alianza será leal con él.

 

Lucas 1, 67-79

67 Zacarías, su padre, quedó lleno de Espíritu Santo, y profetizó diciendo: 68 «Bendito el Señor Dios de Israel porque ha visitado y redimido a su pueblo. 69 y nos ha suscitado una fuerza salvadora en la casa de David, su siervo, 70 como había prometido desde tiempos antiguos, por boca de sus santos profetas, 71 que nos salvaría de nuestros enemigos y de las manos de todos los que nos odiaban 72 haciendo misericordia a nuestros padres y recordando su santa alianza 73 y el juramento que juró a Abraham nuestro padre, de concedernos 74 que, libres de manos enemigas, podamos servirle sin temor 75 en santidad y justicia delante de él todos nuestros días. 76 Y tú, niño, serás llamado profeta del Altísimo, pues irás delante del Señor para preparar sus caminos 77 y dar a su pueblo conocimiento de salvación por el perdón de sus pecados, 78 por las entrañas de misericordia de nuestro Dios, que harán que nos visite una Luz de la altura, 79 a fin de iluminar a los que habitan en tinieblas y sombras de muerte y guiar nuestros pasos por el camino de la paz.»

Isaías 62, 1-5

1 Por amor de Sión no he de callar, por amor de Jerusalén no he de estar quedo, hasta que salga como resplandor su justicia, y su salvación brille como antorcha. 2 Verán las naciones tu justicia, todos los reyes tu gloria, y te llamarán con un nombre nuevo que la boca de Yahveh declarará. 3 Serás corona de adorno en la mano de Yahveh, y tiara real en la palma de tu Dios. 4 No se dirá de ti jamás «Abandonada», ni de tu tierra se dirá jamás «Desolada», sino que a ti se te llamará «Mi Complacencia», y a tu tierra, «Desposada». Porque Yahveh se complacerá en ti, y tu tierra será desposada. 5 Porque como se casa joven con doncella, se casará contigo tu edificador, y con gozo de esposo por su novia se gozará por ti tu Dios.

 

Salmo 89, 4-5; 16-17; 27; 29

4 «Una alianza pacté con mi elegido, un juramento hice a mi siervo David: 5 Para siempre jamás he fundado tu estirpe, de edad en edad he erigido tu trono.»

16 Dichoso el pueblo que la aclamación conoce, a la luz de tu rostro caminan, oh Yahveh; 17 en tu nombre se alegran todo el día, en tu justicia se entusiasman.

27 «El me invocará: ¡Tú, mi Padre, mi Dios y roca de mi salvación!

29 «Le guardaré mi amor por siempre, y mi alianza será leal con él.

 

Hechos de los apóstoles 13, 16-17; 22-25

16 Pablo se levantó, hizo señal con la mano y dijo: «Israelitas y cuantos teméis a Dios, escuchad: 17 El Dios de este pueblo, Israel, eligió a nuestros padres, engrandeció al pueblo durante su destierro en la tierra de Egipto y los sacó con su brazo extendido.

22 Depuso a éste y les suscitó por rey a David, de quien precisamente dio este testimonio: He encontrado a David, el hijo de Jesé, un hombre según mi corazón, que realizará todo lo que yo quiera. 23 De la descendencia de éste, Dios, según la Promesa, ha suscitado para Israel un Salvador, Jesús. 24 Juan predicó como precursor, ante su venida, un bautismo de conversión a todo el pueblo de Israel. 25 Al final de su carrera, Juan decía: “Yo no soy el que vosotros os pensáis, sino mirad que viene detrás de mí aquel a quien no soy digno de desatar las sandalias de los pies.”

 

Mateo 1, 1-25

1 Libro de la generación de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abraham: 2 Abraham engendró a Isaac, Isaac engendró a Jacob, Jacob engendró a Judá y a sus hermanos, 3 Judá engrendró, de Tamar, a Fares y a Zara, Fares engendró a Esrom, Esrom engendró a Aram, 4 Aram engendró a Aminadab, Aminadab engrendró a Naassón, Naassón engendró a Salmón, 5 Salmón engendró, de Rajab, a Booz, Booz engendró, de Rut, a Obed, Obed engendró a Jesé, 6 Jesé engendró al rey David. David engendró, de la que fue mujer de Urías, a Salomón, 7 Salomón engendró a Roboam, Roboam engendró a Abiá, Abiá engendró a Asaf, 8 Asaf engendró a Josafat, Josafat engendró a Joram, Joram engendró a Ozías, 9 Ozías engendró a Joatam, Joatam engendró a Acaz, Acaz engendró a Ezequías, 10 Ezequías engendró a Manasés, Manasés engendró a Amón, Amón engendró a Josías, 11 Josías engendró a Jeconías y a sus hermanos, cuando la deportación a Babilonia. 12 Después de la deportación a Babilonia, Jeconías engendró a Salatiel, Salatiel engendró a Zorobabel, 13 Zorobabel engendró a Abiud, Abiud engendró a Eliakim, Eliakim engendró a Azor, 14 Azor engendró a Sadoq, Sadoq engendró a Aquim, Aquim engendró a Eliud, 15 Eliud engendró a Eleazar, Eleazar engendró a Mattán, Mattán engendró a Jacob, 16 y Jacob engendró a José, el esposo de María, de la que nació Jesús, llamado Cristo. 17 Así que el total de las generaciones son: desde Abraham hasta David, catorce generaciones; desde David hasta la deportación a Babilonia, catorce generaciones; desde la deportación a Babilonia hasta Cristo, catorce generaciones. 18 La generación de Jesucristo fue de esta manera: Su madre, María, estaba desposada con José y, antes de empezar a estar juntos ellos, se encontró encinta por obra del Espíritu Santo. 19 Su marido José, como era justo y no quería ponerla en evidencia, resolvió repudiarla en secreto. 20 Así lo tenía planeado, cuando el Angel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: «José, hijo de David, no temas tomar contigo a María tu mujer porque lo engendrado en ella es del Espíritu Santo. 21 Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados.» 22 Todo esto sucedió para que se cumpliese el oráculo del Señor por medio del profeta: 23 Ved que la virgen concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrán por nombre Emmanuel, que traducido significa: «Dios con nosotros.» 24 Despertado José del sueño, hizo como el Angel del Señor le había mandado, y tomó consigo a su mujer. 25 Y no la conocía hasta que ella dio a luz un hijo, y le puso por nombre Jesús.