Lectio Divina

Pesebre, Casa del Ave María.
Foto: Archivo.

ECO

“… los pastores fueron corriendo y encontraron a María y a José y al Niño acostado en el pesebre.” Lucas 2, 16-21

MEDITACIÓN

Este eco me centra en el verdadero sentido de la Navidad. La Iglesia nos presenta hoy a la joven Madre Virgen; también es imposible no mirar a José humilde, silencioso, solícito y sorprendido ante el Niño, el Mesías prometido a quién debe cuidar lo mismo que a su Madre.

Yo también quiero encontrarlos pero necesito la simplicidad y disposición de los pastores para hallar a los tres en la: ausencia del ruido y la dispersión, en la humildad y en la verdadera pobreza de espíritu, sin ninguna otra ambición que la de amarles e imitarles. Todo me lleva a la oración silenciosa, al gozo sereno y a la paz que regala el Padre a los de buena voluntad.

Mi Bautismo y consagración religiosa deben centrarme en el despojo y en la simplicidad de la cueva y en María y José que nos están presentando al Verbo Eterno del Padre convertido en el Hombre Dios y en Nuestro Salvador.

ORACIÓN

¡Gloria, gloria y honor al Señor! (A.E.C.)

Lecturas del día

Santa María, Madre de Dios