“Cuando Martha se enteró de que llegaba Jesús, salió a su encuentro…” Juan 11, 1-45
La actitud y las palabras de Martha, me interpelan con mucha fuerza. Primero, sale a su encuentro y luego, le reclama porque no estuvo cuando su hermano enfermó y también le hace una rotunda declaración de fe en Él y le dice: “Pero aún ahora sé, que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo concederá.” Y más adelante, añade: “Si Señor; yo creo que tú eres el Mesías, el Hijo de Dios, el que tenía que venir al mundo.”
Marta fué una mujer que creyó, buscó a Jesús, le habló con decisión y supo servirle con generosidad. Me encantan su fortaleza, prontitud y amor. Debo imitarla y obrar de acuerdo a lo que hay en mi corazón.
Santa Marta, alcánzanos tus actitudes de verdadera creyente. (A.E.C.)