“Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerza. Y al prójimo como a ti mismo”. Lucas 10, 25-37
Tengo ante mí la síntesis magistral de la enseñanza de Jesús, mi Dios hecho Hombre, mi Único Maestro, mi Camino, mi Verdad y mi Vida. Me manda amarles a Ellos, la Trinidad Santísima y al prójimo como me amo a mi misma. Si amo de verdad soy fiel con su gracia, vivo para amar y lo mío queda relegado. Si amo, no calculo, me doy y busco agradar a Quien amo. Necesito la fuerte acción del Espíritu Santo para tener luz, generosidad y fortaleza en cada ocasión.
Madre, intercede por mí para que sea coherente. (A.E.C.)