Sagrada Biblia.
Foto: Archivo.
“El cielo y la tierra pasarán pero mis Palabras no pasarán”. Lucas 21, 29-33
No niego que cada día suceden cosas espantosas a todos los niveles: guerras, calamidades, pobreza suma o más concretamente miseria extrema. Y lo peor: la mayor parte de las personas están de espaldas a nuestro Dios, porque nunca han experimentado su Infinito Amor.
Pero yo afirmo con todas mis fuerzas que el contenido de la Sagrada Escritura y cada Palabra de Jesús en su Evangelio, es veraz y actual. Sé y confieso que mi Cristo es el Camino, la Verdad y la Vida. Es el Camino: en Él siempre estamos enrutados hacia el Padre. Su Palabra es eterna, la muerte ya no tiene dominio sobre Él. Es el mismo ayer, hoy y siempre.
Madre Nuestra llévanos a Jesús. Amén. ¡Aleluya! (A.E.C.)
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