“Con lazos humanos los atraje, con vínculos de amor. Fuí para ellos como quien alza un niño hasta sus mejillas.” Oseas 11, 1-4, 8c-9
En realidad la gran mayoría de las personas no conoce, no cree, no valora, ni corresponde al Amor tierno e infinito de nuestro Dios. Él Mismo se compara con Aquél que toma al pequeño para mirarlo y pegar su mejilla a la suya en gesto de caricia delicada y tierna. Nuestro Hacedor nos ama, no quiere que nos alejemos de Él. Le hieren nuestros desórdenes, nuestros pecados e ingratitudes. Repaso una y otra vez citas como la que consigno aquí porque confortan y alegran mi alma. Además, hace ya muchos años que me apoyo en ellas para proclamar a mis hermanos que hay Alguien que los ama como nunca lo soñaron. Escribo solamente una: “Así dice Yahvé, tu Creador: no temas, te he llamado por tu nombre, tú eres mío, eres precioso a mis ojos, eres estimado y Yo te amo. No temas que Yo estoy contigo.” Isaías 43, 1-5
Gracias Padre, muchísimas gracias por tanto Amor. Madre, no me dejes ser malagradecida. (A.E.C.)