“Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús porque Él salvará a su pueblo de sus pecados.” Mateo 1, 18-24
La Santa Iglesia nos está preparando para celebrar el Nacimiento de Nuestro Señor Jesucristo. Cada festividad tiene su gracia particular. Deseo vivamente que nuestro mundo, nuestra amada Iglesia, nuestro entorno, nuestras familias y muy especialmente nuestra Familia Religiosa, nuestros amigos y benefactores, todos nosotros experimentemos la salvación por parte del Hijo de Dios hecho Hombre en María. Muchos están oprimidos por cadenas de odio, de violencia, de mentira, de error en todos los sentidos. Pero deseo particularmente que nuestras familias y las que son muy cercanas a nosotros se acerquen a la cuevita de Belén en actitud de Paz, de perdón, de reconciliación y que mirando a María, a José y al Dios Encarnado puedan recibir la paz que nos anunciaron los Angeles.
Jesús amado, con tu Mamacita que también es la nuestra, te pido para todos nosotros justicia, paz, amor y verdad. (A.E.C.)