Santa María Goretti, virgen y mártir
6 julio, 2018
XIV Domingo Ordinario
8 julio, 2018

Primer Sábado, Memoria de la Santísima Virgen

Amós 9, 11-15

11 Aquel día levantaré la cabaña de David ruinosa, repararé sus brechas y restauraré sus ruinas; la reconstruiré como en los días de antaño, 12 para que posean lo que queda de Edom y de todas las naciones sobre las que se ha invocado mi nombre, oráculo de Yahveh, el que hace esto. 13 He aquí que vienen días – oráculo de Yahveh – en que el arador empalmará con el segador y el pisador de la uva con el sembrador; destilarán vino los montes y todas las colinas se derretirán. 14 Entonces haré volver a los deportados de mi pueblo Israel; reconstruirán las ciudades devastadas, y habitarán en ellas, plantarán viñas y beberán su vino, harán huertas y comerán sus frutos. 15 Yo los plantaré en su suelo y no serán arrancados nunca más del suelo que yo les di, dice Yahveh, tu Dios.

 

Salmo 85, 9-14

9 Voy a escuchar de qué habla Dios. Sí, Yahveh habla de paz para su pueblo y para sus amigos, con tal que a su torpeza no retornen. 10 Ya está cerca su salvación para quienes le temen, y la Gloria morará en nuestra tierra. 11 Amor y Verdad se han dado cita, Justicia y Paz se abrazan; 12 la Verdad brotará de la tierra, y de los cielos se asomará la Justicia. 13 El mismo Yahveh dará la dicha, y nuestra tierra su cosecha dará;14La Justicia marchará delante de él, y con sus pasos trazará un camino.

 

Mateo 9, 14-17

14 Entonces se le acercan los discípulos de Juan y le dicen: «¿Por qué nosotros y los fariseos ayunamos, y tus discípulos no ayunan?» 15 Jesús les dijo: «Pueden acaso los invitados a la boda ponerse tristes mientras el novio está con ellos? Días vendrán en que les será arrebatado el novio; entonces ayunarán. 16 Nadie echa un remiendo de paño sin tundir en un vestido viejo, porque lo añadido tira del vestido, y se produce un desgarrón peor. 17 Ni tampoco se echa vino nuevo en pellejos viejos; pues de otro modo, los pellejos revientan, el vino se derrama, y los pellejos se echan a perder; sino que el vino nuevo se echa en pellejos nuevos, y así ambos se conservan.»