Nuestra Formación
"Ella constituye una gracia excepcional que supone siempre, por parte de Dios, un gran misterio de predilección, otorgado como don gratuito a quienes ha escogido libremente de entre su pueblo y para el bien del mismo " Perfectae Caritatis 5
Postulantado
Etapa previa a la entrada en el noviciado, en la que ha de comprobarse la validez de la llamada. Es un tiempo dedicado al mutuo conocimiento. Durante él, las Superioras conocerán a las candidatas y éstas al Instituto.
Noviciado
Es la segunda etapa de formación. En ella, la joven inicia el camino de la propia identidad vocacional en la vida religiosa (Cfr. Potissimum Institutioni 45).
La formación durante el noviciado debe ser, ante todo, “como un itinerario de progresiva asimilación de los sentimientos de Cristo, hacia el Padre” (Vita Consecrata 65). Es un proceso vital a través del cual la novicia entra, poco a poco, en comunión con Él (Cfr. Flp. 2,5-11), hasta permitirle vivir más y más en ella (Cfr. Ga. 2,20). La vida espiritual tiene la primacía, pero sin descuidar los otros aspectos de la formación.
Insignias: Hábito con velo blanco y Medalla
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Hábito con velo blanco es distintivo de Consagración y con él se anuncia la futura resurrección.
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Medalla de la Virgen Milagrosa que es un signo de la protección de la siempre Virgen María y nos recuerda que debemos imitar sus virtudes.
Juniorado
Profesando públicamente los votos de castidad, pobreza, obediencia y promesa de humildad, la religiosa se consagra a Dios por el ministerio de la Iglesia y se incorpora al propio Instituto, con todos los derechos y deberes estipulados en estas Constituciones (Cfr. can. 654).
La primera profesión inaugura una nueva fase en la formación. En esta etapa las junioras pondrán sumo cuidado en madurar en su identificación con Cristo (Cfr. Vita Consecrata 16.65). Deben tener conciencia de que aprenden una sola ciencia: la de la fe y la del Evangelio (Potissimum Institutioni 61).
Insignias: Hábito con velo Azul y Cristo y Constituciones
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El hábito y el velo significan “separación”, Consagración a Dios.
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El Cristo significa la configuración con Cristo Crucificado. “Vivo yo, ya no yo; vive Cristo en mí”. Gálatas 2, 20
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Constituciones: Que nos indican la Voluntad de Dios para nosotras.
Profesión perpetua
“Ella es el signo de la unión indisoluble de Cristo con la Iglesia su esposa” (Lumen Gentium 44).
Cumplido el tiempo de los votos temporales, la religiosa que lo pida espontáneamente y sea considerada idónea, debe ser admitida a la renovación de sus votos o a la profesión perpetua.
Antes de la profesión perpetua, la religiosa hace, en la medida de lo posible, los Ejercicios Espirituales de San Ignacio durante un mes. Ésto, a fin de vencerse a sí misma y de ordenar su vida según el espíritu del Instituto, sin determinarse jamás por afición alguna que desordenada sea. No puede ser dispensada de ellos sino por la Madre General y su Consejo, en algún caso extraordinario, pues es uno de los medios más eficaces de formación del espíritu y como el alma de esta etapa previa a los votos perpetuos.
Insignias: Anillo y capa
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El Anillo significa Alianza y Fidelidad, sello del Espíritu Santo a la Esposa de Cristo.
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La Capa significa que estamos bajo la protección de la siempre Virgen María, y debemos ser para quien nos mire, un trasunto Suyo.
